

La vendimia 2025 para la producción de la Bodega Antigal comenzó con un anticipo en las variedades blancas, impulsado por un periodo de altas temperaturas a fines de enero e inicios de febrero. Este fenómeno aceleró la maduración, especialmente en zonas de altura como Gualtallary, donde los primeros vinos mostraron gran frescura, acidez marcada y expresión varietal.
En el caso de las uvas tintas, la cosecha se adelantó cerca de dos semanas respecto a lo habitual. Sin embargo, el descenso de temperaturas en marzo permitió una maduración más lenta y equilibrada, dando lugar a vinos tintos con acidez natural bien conservada, frescura y una expresión prolongada en boca.
Uno de los hechos más llamativos fue el inicio temprano de la cosecha de Malbec en Gualtallary, que comenzó el 22 de febrero, una fecha poco habitual en comparación con años anteriores.
La temporada, en general seca y cálida, favoreció la obtención de vinos con estructura, intensidad aromática y gran potencial de guarda. La vendimia se extendió cerca de 85 días, logrando un balance entre precisión técnica y paciencia en los tiempos de recolección.
El ciclo 2024-2025 estuvo marcado por un clima dinámico y desafiante:
Una primavera húmeda con lluvias muy superiores al promedio, lo que permitió un inicio vegetativo vigoroso y equilibrado.
Un verano cálido, con varios días por encima de los 35 °C, que aceleró la maduración.
Un otoño fresco y seco, ideal para una cosecha escalonada y sanitaria.
Este escenario se tradujo en un incremento del 16 % en los rendimientos respecto a 2024, con un total de 1.558.961 kilos de uva cosechados, manteniendo estándares de alta calidad.
El Malbec representó el 60 % de la producción, seguido por el Cabernet Sauvignon (30 %) y el Chardonnay (7 %). El 68 % de la uva fue de fincas propias, reflejando un manejo agronómico preciso y enfocado en el equilibrio y la sanidad.
Además, la incorporación de huevos de concreto y foudres en la vinificación aportó nuevas posibilidades de crianza, sumándose a los tanques de acero inoxidable. Este abanico de técnicas permitió resaltar el carácter de cada parcela, dar mayor definición a los perfiles de vino y conservar la frescura natural de la fruta.
La vendimia 2025 deja como saldo una temporada climáticamente atípica, pero altamente favorable para el desarrollo de vinos frescos, vibrantes y de gran expresión de origen. Antigal reafirma así su posición como referente de la vitivinicultura, ofreciendo etiquetas que combinan volumen, calidad y tipicidad en cada copa.