Por: Redacción Sabores de Argentina

En pleno corazón de la primera zona vitivinícola de Mendoza, Bodega Trivento inauguró Casa Drummond, un espacio que invita a descubrir el vino desde su historia, su paisaje y su identidad. Rodeada de viñedos y jardines, la casa se integra al entorno como un homenaje al origen del vino mendocino.

Construida en 1940, la residencia fue cuidadosamente restaurada para preservar su valor arquitectónico y cultural, en diálogo con la naturaleza y el terroir.

Vinos, historia y experiencias auténticas

Casa Drummond nace de una profunda recuperación patrimonial, que pone en valor el legado inmigrante en la vitivinicultura mendocina. “Buscamos que cada visitante experimente la identidad de nuestros vinos”, explicó Marcos Jofré, CEO de Trivento.

La propuesta conecta pasado y presente a través de recorridos y degustaciones diseñados para una experiencia cercana.

Patrimonio vitivinícola puesto en valor

Degustaciones pensadas para vivir el terroir

El espacio ofrece experiencias enoturísticas de 90 minutos, con grupos reducidos y reserva previa. Incluyen copa de bienvenida, visita a la bodega y la casa histórica, y degustación de cuatro vinos con quesos.

Entre las opciones se destacan Terroir Mendocino, Selección del Enólogo y propuestas con vinos de alta gama como Eolo y Stratus.

Un nuevo capítulo del enoturismo mendocino

Con Casa Drummond, Trivento amplía su propuesta turística y refuerza su compromiso con la identidad y la cultura del vino. Una experiencia que integra historia, paisaje y gastronomía en un mismo recorrido.